Entre los tantos factores que pueden incidir para que una persona suba de peso y engorde, también podemos señalar a la falta de sueño como uno de los principales gestores de la obesidad. Y es que si no se duerme y se descansa correctamente, existe un gran riesgo de aumentar de peso, según estudios realizados últimamente.
Dicho de otra manera, si dormimos como se debe, podemos evitar que aumentemos de peso, aún cuando se sabe que al dormir el cuerpo humano es cuando menos calorías quema, entonces ¿a qué se debe esta afirmación?
Según los estudios llevados a cabo por la Universidad de Columbia, y que se realizó en alrededor de 18 mil personas cuyas edades estaban entre los 32 y los 59 años, se pudo comprobar que aquellos que dormían menos de cuatro horas por las noches tenían un 73% de probabilidad de adquirir obesidad.
Y la razón se hallaba básicamente en los efectos que esta situación producía en las hormonas del apetito, es decir, en la hormona llamada leptina, que es la que regula el grado de apetito y el peso del organismo, además de avisarle a nuestro cerebro de las reservas de energías de las que dispone el cuerpo.
Todo esto parece tener sus inicios cuando en algún momento de la historia los seres humanos poseían un sistema que regulaba su metabolismo almacenando grasas durante el verano y sus cortas noches, en donde la comida existía en mayores cantidades, para de esta manera, preparar al organismo para resistir los embates del invierno.
El resultado de este comportamiento prehistórico, tal parece que desarrolló en el cuerpo del hombre la necesidad de comer más y almacenar grasas cuando se duerme menos.
Hasta el momento, esta es la explicación más lógica para este hecho, que al margen de las causas precisas, ha demostrado con la investigación la tendencia a engordar cuando el sueño nocturno se da en pocas horas.
Fuente: News BBC
Imagen: Dura Gordura Blogspot
Tags Blogalaxia: Salud, obesidad, dormir poco.
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