Caminar como ejercicio no es exactamente lo mismo que hacerlo como lo practicamos diario para ir de un lado a otro o dar un paseo. Cuando ya se vuelve una forma de deporte debe de tomarse en cuenta una buena postura y el movimiento de brazos y piernas coordinadas, para obtener mayor velocidad y mejores resultados.
Si estás empezando a caminar conoce la manera en que debes colocar tu cuerpo para un ejercicio satisfactorio. Lo primero es la posición de tu cuerpo, una buena postura de permitirá caminar cómodo y cuidar tu espalda.
- Mantente derecho.
- Trata de alongar tu cuerpo hacia arriba y no arquees la espalda.
- No te inclines ni hacia adelante ni hacia atrás, podrías poner peso en tu espalda.
- Tu mirada debe ver adelante, ni al suelo ni arriba, de manera que tu barbilla esté en paralelo con el suelo.
- Sume el estómago para trabajar también los abdominales mientras caminas.
Los movimientos de brazos son esenciales para acelerar tu caminata, son el balance con tus piernas, y si realizas los movimientos correctos, quemarás más calorías.
- Tus codos deben doblar en un ángulo de 90 grados.
- Cierra los puños sin forzarlos.
- Mantén los codos cerca del cuerpo.
- Al ir hacia adelante, tu mano no debe pasar de la mitad de tu cuerpo ni elevarse demasiado. Esto último no te ayuda a ir más rápido.
- Si al principio sientes tus brazos muy cansados, haz los movimientos por 5 ó 10 minutos, y luego déjalos descansar hasta que desees empezar de nuevo.
Para dar un paso correcto es importante que lo primero que toque el piso sea tu talón y que de ahí vayas posando el pie con todas sus partes hasta los dedos. Debes escoger zapatos lo bastante flexible para realizar este movimiento y terminar con un empuje en los dedos de los pies.
No abras demasiado el paso, no irás más rápido y te cansarás más que con breves pasos, aumentando la velocidad poco a poco. Irás perfeccionando tu técnica a medida que sigas caminando.
Fuente: About.
Imagen: West\Boylston.
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